Estrellas humanas.

-¿No te gustan?
-¿El qué? ¿Las estrellas?
-Sí.
-Joder, están muy vistas, son tan sólo esferas de plasma que brillan con luz propia, sin cansarse, con constancia, como esas personas que sonríen a pesar de todo... Me fascinan, pero no tanto...
-Eres contradictoria. Y extraordinaria.
-Como ellas. Siguen brillando aun estando solas...
-Como tú.
-Como yo.

Contemplamos cosas que desconocemos diariamente.

No te has parado a pensar... Seguro que no; en que ese chico que ves todos los días en la parada del bus, no va a quedar con sus amigos, ni con su novia, viaja todos los días para ver a su hermano interno en el hospital por cáncer terminal... Y ahí está, te saluda todos los días con alegría de verte.
Tampoco habrás pensado que esa parejita de ancianos, que siempre van peleándose, pero se aman... Que no llegan a fin de mes, y sufren más sus dolores por no poder comprar medicamentos y poder dar de comer a sus hijos, nietos y el pequeño bisnieto de 5 meses.
Tampoco te fijaras en esa chica que siempre va sería con cascos, que parece antipática y antisocial, pero que va a ayudar a un albergue para desfavorecidos...

Y tampoco en lo pequeño que se ve el sol, y la infinita vida que nos da...

No te pares a pensar, porque las apariencias siempre engañan.

Valora las pequeñas cosas. Es mi pequeño consejo que si no lo tomas, nunca, nunca serás feliz.